Primavera Sound se instaló oficialmente en Santiago. La primera estación en este viaje musical, Road to Primavera, fue una poderosa y multitudinaria celebración del rock independiente este domingo 16 de octubre en Movistar Arena.
El debut de Niños del Cerro, la voz especial de Cat Power, la energía y el talento de Jack White y las leyendas del rock alternativo con Pixies fueron los protagonistas de una noche mágica.
Lo de este domingo 16 de octubre en Movistar Arena fue sueño hecho realidad para muchos: para los afortunados que habían tenido la oportunidad de vivir Primavera Sound en Barcelona y para una gran mayoría que presenció la llegada de uno de los festivales más importantes del mundo a su ciudad.
Primavera Sound no es un festival más. La selección de los artistas que convoca, basada en criterios más allá de las ventas, es ampliamente reconocida y su efectividad quedó demostrada este domingo en Movistar Arena. Niños del Cerro, Cat Power, Jack White y Pixies hicieron un valioso recordatorio: las
guitarras tocadas con pasión y talento aún son una expresión absolutamente válida que sigue encantando a los fanáticos.
“Se notó una disposición especial en el público, ese espíritu de ir a escuchar música en vez de esperar que el headliner salga pronto. Es un cartel súper jugado, con nombres que atraen a mucha gente, pero también estamos nosotros que nunca habíamos sido invitados a un festival masivo en Chile, junto a un montón de otras bandas con propuestas jugadas, como Congelador y Familea Miranda. Habla muy bien de la curatoría del festival”, dice con orgullo Simón Campusano, compositor y vocalista de Niños del Cerro, poco después de bajar del escenario de Movistar Arena.
A continuación, Cat Power hizo lo que mejor sabe, cautivar al público con la suavidad de su voz, su punto de vista en los covers que contiene su último álbum e incluso sorprender con el uso de autotune como recurso para aportar texturas al timbre característico de Chan Marshall.
“Contundente” y “energético” fueron palabras con que la gente empezó a describir casi instantáneamente en redes sociales el show de Jack White. El público lo acompañó coreando clásicos como Seven Nation y vibró con su repertorio más reciente; abarcando registros que se movieron fluidamente desde el
el rock al country e incluso al rockabilly.
Pixies, banda emblemática del rock alternativo norteamericano, demostraron el peso de décadas girando por grandes escenarios de todo el mundo. Probablemente el show más esperado de la noche no decepcionó a fanáticos de edades notoriamente variadas, e incluyó en su set list Where is my Mind, Here Comes your Man y otros clásicos de su discografía. Junto a ellos interpretó parte del material que contiene su álbum recién lanzado Doggerel.
Más de 8 mil personas asistieron a esta cita con leyendas vivientes del rock y el indie. Un sonido impecable, facilidad en los accesos al recinto y a las barras de comida fueron factores en que muchos coincidieron en destacar.
Road to Primavera, fue sin duda un gran paso para consolidar a Primavera Sound, uno de los festivales más relevantes del sur de Europa como el hito musical de ésta época al sur del mundo.
