· El plan de acción impulsado por Primavera Sound en su edición de 2019 volverá a combatir cualquier actitud que comprometa la libertad de mujeres e identidades y cuerpos no normativos en cuanto al género y la sexualidad
· Tanto los dos estands instalados en el recinto como el personal itinerante debidamente formado formarán una red de apoyo para que el público disfrute de un entorno seguro durante la próxima edición del festival
Pluralidad, diversidad, heterogeneidad. Con el objetivo de que el cartel artístico de Primavera Sound no sea un póster estático sino un espejo en el que su público pueda reflejarse y reconocerse con orgullo, el protocolo Nobody is Normal anima a celebrar la liberación y la transgresión en comunidad durante la próxima edición del festival.
Cinco años después de su implantación, que simbólicamente coincidió con que la edición de 2019 presentó el primer cartel paritario en cuanto a género en la historia de Primavera Sound, el plan de acción contra agresiones y acosos sexuales vuelve a plantar cara a los discursos de odio que proliferan en muchos rincones de la sociedad. Contra el machismo, la transfobia, la homofobia, la lesbofobia o cualquier otro intento de condicionar la experiencia en el festival de cualquier asistente, Nobody is Normal. Desde luego no tienen hueco en Primavera Sound: porque el disfrute en el festival no puede estar sujeto de ninguna manera a las convenciones de género. Aquí cabe todo menos la discriminación precisamente porque un evento musical como este representa un contexto especialmente propicio para desafiar los estándares.
Para que el público pueda hacerlo en un entorno seguro, el recinto del festival contará un año más con su propia red de apoyo para mujeres, disidencias sexuales y formas de existencia alejadas de lo establecido. Porque la alerta desaparece si la experiencia Primavera Sound se vive en comunidad. En el Parc del Fòrum habrá instalados dos estands informativos, a los que se podrá acudir tanto a reportar cualquier caso de violencia y discriminación de género sufrido o detectado como a conocer los detalles del protocolo Nobody is Normal. Además, habrá personal itinerante (una plantilla diversa en cuanto al género, la sexualidad, la clase social, la racialización y la corporalidad) responsable de tareas de información y detección de posibles casos y todo el staff que trabaja en el festival estará debidamente formado para derivar cualquier incidencia correctamente.
Nobody is Normal está preparado para una acción directa sobre el terreno en la próxima edición de Primavera Sound, pero también para una labor indirecta igual de valiosa. Y es que este marco de liberación y visibilización impulsado por el festival nace con el convencimiento de que los cambios de imaginario pueden acelerar transformaciones en la sociedad.